La reforma política

La Presidenta convocó ayer a un amplio diálogo para alcanzar acuerdos en economía, democracia y sociedad. Llamó a iniciar una profunda reforma política. Semejante empresa requiere que el Gobierno y la oposición acuerden cambios para fortalecer a la democracia.
Como es en Santa Fe, la Argentina debe volver a celebrar internas partidarias abiertas y simultáneas.
Según esa síntesis, que no contiene mayores detalles, el proyecto del gobierno lleva las siguientes propuestas:
Elecciones primarias, abiertas, simultáneas, obligatorias y vinculantes, para todos los partidos que postulen precandidatos para nominar a cargos electivos nacionales.
El voto será obligatorio: Se podrá emitir un voto, para una sola agrupación política.
Se eliminan las listas “Colectoras y Espejos”.
Se votará con el mismo padrón que la elección general.
Regulación de la publicidad en radio y televisión bajo criterios de igualdad para todos los partidos políticos. Distribución equitativa de espacios en medios audiovisuales.
Prohibición de publicidad de actos de gobierno desde 15 días antes de la fecha de elección.
Para ser candidato presidencial se necesita contar con el 3 por mil del padrón general, es decir, alrededor de unos 500 mil votos.
Se acortan las campañas electorales a 35 días para la elección general y 30 días para las primarias. La publicidad en los medios audiovisuales será de 25 días en la elección general y 20 días en las primarias.
La distribución de los aportes y los espacios en los medios será del 50 por ciento para todos los partidos de manera igualitaria; y el 50 por ciento de acuerdo al resultado de la elección anterior.
Unificación de mesas femeninas y masculinas. Reducción de votantes por mesa.
Modernización y Digitalización del Registro (padrón nacional) de Electores.
Creación de Registro Permanente Voluntario de autoridades de mesa.
Creación del cuarto auxiliar de boletas.
Mayor control por parte de la Justicia, sobre el mínimo de afiliados por partido político.
Para constituirse como partidos se necesitarán afiliaciones permanentes, en lugar de adhesiones.
No podrán ser candidatos quienes estén procesados por crímenes de lesa humanidad.